En un pequeño y remoto lugar llamado Isla Marion , en la región subantártica, al sur de Sudáfrica, los científicos han capturado varios lobos marinos que tratan de tener relaciones sexuales con pingüinos rey. Lo que al comienzo pudiera parecer un poco divertido, se torna molesto cuando la escena parece más un abuso sexual forzado. Los investigadores han sugerido que lo más probable es que el acto sea el resultado de la frustración sexual por parte de los lobos marinos, más que una necesidad de distribuir sus genes. El comportamiento fue presenciado por primera vez en la isla Marion en 2006 por el experto en mamiferología Nico de Bruyn, de la Universidad de Pretoria en Sudáfrica. Él observó atónito, como un lobo marino antártico decidió montar un pingüino rey, sin importar ser varias veces más grande y más pesado, el lobo marino no vio ningún problema en aplastar su 'compañero' por un largo tiempo, lo importante era sentirse a gusto. Desde entonces, de Bruyn